Primero parece que le gusto, que quiere algo… después estoy una semana sin saber nada de él... Al principio puedo pensar que es pronto, que puede que no sepa lo que quiere y, como yo siempre me agobio y me canso en seguida, casi lo agradezco. Es algo diferente y el hecho de no tenerlo siempre ahí creo que me engancha más. Pero eso esta bien al principio, no se, llega un momento que tendría que avanzar, ¿no? Sólo un paso, aunque sea pequeño. Hace dos meses que empezó esto y creo que estamos en el mismo punto.
El otro día pensé que cuando volviera a decirme algo le diría la verdad: que estaba cansada de esto, que no sabía a dónde íbamos y que prefería que no nos viéramos más… pero fui incapaz, le contesté como siempre, como si no hubiera pasado nada. Y estoy segura de que volveremos a quedar y será todo como siempre… ni más… ni menos…
Y es que no soy capaz de decirle lo que siento porque no se lo que piensa él (tampoco soy capaz de preguntárselo), siempre el mismo miedo… y si no siente lo mismo? y si sale corriendo? y si hago el ridículo? Prefiero quedarme con la duda...
" Una de cal y otra de arenay yo sin rumbo en las aceras
a las que le robo el aire..
..quiero la mitad de todo
porque la mitad de nada
no será suficiente...
quiero que me quieras
porque quererte quisiera
aunque sea impertinente..."
-Carlos Chaouen-